15/7/11

Nos quedan las ganas.

A veces las ganas no son suficientes, porque falta la fuerza. Y la poca que me queda vive debajo del estómago, recelosa de que la vean.

17/1/11

Transplante.

Hoy me arranco el corazón, me transplanto el tuyo y te presto el mío. Uno debería poder intercambiar fácilmente órganos cuando la carga es demasiado pesada.

4/12/10

[...]

Seguía pasando. Había un momento en el que las neuronas rompían su conexión. Los rostros más queridos iban desapareciendo de mi mente, uno por uno. Cuando saludé al último, supe que mi yo tal y como lo conocía desaparecería después. Cuando era más pequeña me atormentaba no volver, pero con el paso de los años, había aprendido a disfrutar esa nada. Porque la nada no duele, la nada no tiene matices, la nada se explica de manera siemple: nada.

Unos segundos, y el shock. Enterré las uñas en el colchón, para no irme. Pero me fui, como siempre. Allí quedó mi cuerpo tendido, sin alma, sin sentir.

2/11/10

This is no ordinary love.

Cuando el lenguaje verbal resulta insuficiente para intentar explicarte lo que siento por tu espalda, por tus rodillas, por tu piel; me entrego al instinto más primario, a las necesidades inmediatas, al morir allí mismo si hiciese falta, a lo más puro, a lo más animal, a lo más nuestro, a lo mejor que he llegado a sentir este alma y este cuerpo.

26/10/10

Hoy sólo necesito un abrazo fuerte que me borre esa horrible sensación de que todo lo que toco se rompe.

20/10/10

Bendita metamorfosis.


Y llegó él, e hizo de mis apatías, anécdotas poco reseñables. Y se puso manos a la obra, recomponiéndome pieza por pieza, untándome con el amor más increíble, y por que no, más impredecible que había sentido nunca. Y me muero cuando me toca, os juro por lo que creais más santo, que me muero cuando me toca.

Y todo aquello que me resgaba el jersey de otoño el año pasado, parece simplemente una de esas malas rachas que tiene toda persona con las visceras un poco palpitantes. Y este otoño está vacío de aquel montón de recuerdos de aquel algo que puede que nunca llegara a existir realmente, y está plagado de atrincheramientos en el sofá, de mantas de leopardo, de kilómetros, de carretera y de bendita metamorfosis.

24/7/10

Sutura.

Déjame curarte. Déjame hacerte una incisión limpia en el pecho. Déjame extirpar el dolor podrido de antaño. Déjame practicarte una sutura pulcra. Déjame aplicarte un vendaje protector. Prometo una cicatrización rápida y un carro de cuidados para tu recuperación.

Déjame que haga de mis "Buenos días" tu despertador. Déjame explicarte que la vida entre dos, es mejor.